Hace 60 años un grupo de empleados progresistas de la OEA (entonces denominada Unión Panamericana) concibió una manera más accesible e inclusiva de servir las necesidades financieras de todos y de manejar su dinero. Con unos cientos de dólares y un par de docenas de cuentas, formaron una Cooperativa dedicada exclusivamente al éxito financiero de las personas asociadas.